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elena@honestamentehablando.com
Es cierto que el polígrafo es 100% confiable?
Inicialmente se enseñaba en las academias de poligrafía que dicho instrumento poseía un 99.9% de confiabilidad; lo cierto es, que dependiendo de la técnica poligráfica que se utilice así mismo varían los niveles de confiabilidad de la prueba; sin embargo, los estudios que se han realizado sobre poligrafía, indican que 93-95% es lo máximo en confiabilidad que puede tener un examen de polígrafo con las técnicas que diariamente utilizan los poligrafistas que ejercen su oficio en empresas públicas como privadas. Teniendo en cuenta esto, se puede decir que un examen de polígrafo oscila entre el 87% y el 93% de confiabilidad dependiendo de la técnica que el poligrafista utilice. Nunca alcanza un 99% como anteriormente se creía. No obstante, aun así, continúa siendo un método con buenos resultados para la evaluación de personas en lo concerniente a honestidad, integridad, credibilidad y confiabilidad. Sin embargo, es aconsejable utilizarse con otras metodologías de evaluación. Por otro lado, es importante decir, que el polígrafo en sí mismo es solo un instrumento que mide reacciones fisiológicas. Es indispensable el rol del poligrafista, la forma como conduzca la prueba, la manera de realizar la entrevista, la atención al detalle, la objetividad e imparcialidad con la cual lleve a cabo el procedimiento y la evaluación de las gráficas es indispensable para obtener unos resultados efectivos y confiables.
¿Es cierto que ingerir café puede afectar negativamente la prueba?
No. Ingerir café o tinto no genera ningún efecto sobre los resultados del polígrafo. Inicialmente también se pensaba que el tinto podría tener efectos estimulantes y contribuir en la generación de reacciones exacerbadas y por lo tanto erróneas en lo concerniente a los resultados de la prueba. Esto se ha desmentido a través de la práctica, ya que en toda evaluación poligráfica es indispensable realizar una primera gráfica (o test de familiarización) a través de la cual el (la) poligrafista toma un primer registro del nivel de reacción de la persona evaluada y con base en ello ya tiene una idea del nivel de reacción de su organismo. Estudios recientes desde la neurociencia, han afirmado que el café aumenta los estados de atención, por lo tanto, en este orden de ideas, sería inclusive benéfico para que la persona presente mayores niveles de atención y alerta durante su examen.
¿Se pueden alterar los resultados del polígrafo? ¿Es decir, se puede burlar la prueba?
No es un secreto para nadie que existen métodos conductuales, físicos, cognitivos y químico-farmacéuticos que podrían alterar o distorsionar los resultados de la prueba, de hecho, algunos de ellos circulan por internet. Sin embargo, las personas entrenadas en poligrafía conocen ampliamente dichos métodos, a los cuales, en la jerga de la poligrafía se les conoce como “contramedidas”. Es así como cualquier poligrafista bien entrenado y experto puede fácilmente detectarlo; en dicho caso, el examen es anulado, lo cual se le notifica a la persona o empresa que envió a realizar la prueba, quedando en evidencia la falta de colaboración y/o intento de manipulación del examen por parte de la persona evaluada.
¿Es la poligrafía una especialización, diplomado, carrera técnica? ¿O qué es?
La poligrafía es un método utilizado para medir el nivel de veracidad en las respuestas que suministra una persona frente a una serie de preguntas. En dicho método, se utiliza el instrumento de poligrafía que generalmente tiene varios dispositivos encargados de medir las respuestas fisiológicas de la persona. Los canales que se miden son: respiración, conductancia electrodérmica y el canal de la respuesta cardiovascular. Es importante añadir entonces, que el polígrafo en sí mismo no mide mentiras, eso es imposible. El polígrafo mide respuestas fisiológicas asociadas al estrés que se genera al decir una mentira, por lo tanto, para que realmente sea efectivo y confiable, es indispensable la labor del poligrafista. De acuerdo a esto, la poligrafía es un curso o entrenamiento que debe cumplir como mínimo con 400 horas de aprendizaje en una academia certificada. Generalmente las personas que se entrenan en esta metodología de detección del engaño, son profesionales en áreas relacionadas con psicología, derecho o ciencias relacionadas; sin embargo, lo puede hacer cualquier profesional, técnico o tecnólogo interesado en aprenderla.